Durante cuatro
años y medio, Antonio Prieto ha sido el párroco de nuestro pueblo. El pasado
domingo nos dijo adiós en su iglesia, nuestra iglesia, en una ceremonia que
estuvo marcada por la despedida y por la curiosidad de conocer al nuevo párroco
que ocupará a partir de ahora el lugar de Antonio. Se llama Mariano, y
Algatocín es su primer destino como cura. Esperemos que en nuestro pueblo se
sienta a gusto y que descubra, disfrute y valore cada uno de los rincones de
Algatocín así como a sus gentes, tan encantadoras y amables con los que nos
visitan, que seguro que pondremos tod@s de nuestra parte para que se sienta
como en casa.
Después de la
misa, celebramos un homenaje Antonio en la Bar-Piscina de Algatocín con un
arroz , que pudo ser posible gracias a la gente del pueblo que donó parte de
los ingredientes de la paella, y a los emprendedores de este bar que ofrecieron
la carne. El arroz estaba buenísimo, desde aquí mis felicitaciones a los cociner@s,
y fue repartido entre todos los asistentes.
Conforme
avanzaba la tarde, y llegaba la hora del café, se ofreció también a los allí
presentes una riquísima tarta de galletas y chocolate que fue rápidamente
devorada.
Gracias a que todos pusimos un poco de nuestra
parte este día fue un día hermoso, con la celebración de varios actos, entre
ellos la entrega de varios regalos a nuestro cura por parte de los vecinos del
pueblo que colaboraron en la iniciativa, algunos presentes en el acto y otros
por diversas circunstancias no se encontraban allí pero se les agradeció que
participaran.
Algunos
componentes de La banda de Música de nuestro pueblo, quisieron acompañar este
acto tocando varios pasodobles, entre ellos “Francisco Alegre”, tan típico de
nuestro pueblo que hizo que varias personas se arrancaran a bailar.
Durante todo el
día del sábado y del domingo los niños/as del pueblo y visitantes pudieron
disfrutar de las colchonetas y castillos hinchables en el polideportivo, para
que disfrutaran de sus últimos días de vacaciones de verano, ya que el lunes 10
se comenzaba el cole.
Esmeralda Moreno.