Me vienen recuerdos de la infancia cuando
estaba en el colegio que esperábamos con gran ilusión este gran día, ya
que significaba el poder compartir con todos mis amigos el “típico
desayuno andaluz” en vísperas del día de Andalucía. Todos nos juntábamos
en nuestras mesas para poder disfrutar de ese “colacao” y mollete con
aceite y entonar el Himno de Andalucía a la vez que hondeábamos nuestras
banderas, elaboradas días anteriores.
Hoy día seguimos
disfrutándolo, y cada año nos reunimos en la plaza del pueblo donde la
banda de música ameniza la fiesta con un repertorio de pasodobles y la interpretación del himno mientras se produce la izada de la bandera. Luego
tiene lugar la tradicional paella que todos los años prepara la
Asociación de Mujeres para todo el pueblo, contando también con la
participación de los mayordomos del pueblo, que en esta ocasión pusieron
una barra.
Pasamos un día agradable, donde el tiempo nos acompaño durante todo el acto.
Antonio Melgar.
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