Un año más nos volvimos a reunir para
celebrar la festividad de Santa Cecilia, patrona de la música, junto a la banda
de música de nuestro pueblo, en la ya quinta edición de este acto.
El pasado 30 de
noviembre, en la iglesia se celebró la tradicional eucaristía, seguida del
concierto. En distintas partes de la misa, se tocaron varios fragmentos de
partituras; y al concluir la misma, los componentes de la banda se colocaron en
el altar mayor para deleitar a los allí presentes con varias obras. Este acto
se estructuró en dos partes, en la primera, se interpretaron marchas de
procesión tales como Jerusalén, Hossanna in Excelsis, Expiración y Patrona,
Señora y Madre. Expiración, contando con la presencia de una compañera de
nuestro director de Alcalá del Valle, una gran voz: Raquel García, que acompaño
cantando la salve es esta última marcha de procesión. En la segunda parte, se
interpretaron obras y bandas sonoras
como Yesterday, Jonh Williams in concert, African Symphony y el pasodoble
Puerta Grande.
Un
evento con el que este grupo nos demuestra que se superan los contratiempos,
que se salvan las dificultades e inconvenientes, siempre que sea más
importantes los buenos ratitos compartidos que los no tan buenos. Y que a pesar
de los obstáculos, se entienden y siguen juntos en esta aventura que es
pertenecer a ese grupo por el disfrute por la música, y por el disfrute de
poder compartirla con todos.
Particularmente, como
componente de la misma, y creo que es una opinión compartida por muchos, me
siento orgullosa de seguir haciendo historia en el pueblo, en la banda y en
nuestras vidas. Ojala tengamos sobre todo salud, para seguir otros años más,
disfrutando de la música y compartiéndola con todo aquel que quiera acercarse a
nosotros.
En
esta edición, por varias circunstancias de la vida, profesionales o personales,
se echaron de menos a compañeros/as que no estuvieron con nosotros. Se tuvieron
muy presentes a lo largo de todo el acto, porque forman parte de esta realidad.
Sobre todo, se tuvo un especial recuerdo por Salomé y Alonso, que están pasando
por el dolor de la pérdida de Vicente. Con ellos y con toda su familia estuvo
nuestro corazón. Sobre todo, por el especial cariño que siempre nos mostró a la
banda Vicente, con sus halagos y su apoyo en todos los actos.
Para
esta banda, preparar esta actuación, ha supuesto un tiempo que se dedica con
mucho cariño e interés, superando los inconvenientes, por el placer de ofrecer
algo distinto de lo que nos escuchan a lo largo del año. Por eso, da gusto ver
reunidos a tanta gente, siendo este año el primero que no llueve, acompañando y
dedicando un ratito de su tiempo para escuchar y compartir este momento de
encuentro con la música. Un orgullo para los componentes el saber que se cuenta
con el interés y la atención de todos los que allí se congregaban.
Terminado el acto
oficial, los componentes de la banda con algunos de sus familiares se juntaron
en la ya también tradicional cena de Santa Cecilia, para disfrutar de una buena
comida en buena compañía y celebrar que una año más volvíamos a estar
juntos…fue una noche de risas, de anécdotas, de cantos, de detalles que hacen
que se disfrute de la compañía de cada uno de los componentes de este grupo. El
año que viene esperamos volver a celebrar, un año más…y si no mejor, por lo
menos igual que esté.
¡Qué viva la música!
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