Llega mayo, llega el buen tiempo, llegan las
romerías…en nuestro pueblo celebramos dos: La romería de la Cruz, que se recoge
en otro artículo y la romería en homenaje a San Isidro Labrador.
Según cuentan las escrituras, San Isidro es un Santo que, debido
a su profesión, labrador, se le considera patrono de los labradores y es
venerado en muchos pueblos con procesiones en las que se bendicen los campos.
En nuestro pueblo, se celebra con especial devoción sobre
todo en la pedanía de Salitre, por estar ubicada allí la Ermita en su honor.
Este año, dado que el día 15 de mayo, día oficial de su
festividad, caía entre semana, se pasó para el siguiente fin de semana,
llevándose a cabo el sábado 17 y domingo 18.
El sábado por la tarde, empezaron los actos con las
tradicionales carreras de cinta a bicicleta y a moto, una fiesta infantil con
globos, pinturas de cara y una merienda para todos los niños y niñas que
asistieron.
Por la noche, se proclamaron las reinas, damas y mister de
las fiestas; continuando la noche con música joven y copas a cargo de los que
se encargaron de coger la barra este año, a pesar del frío que se dejó venir
durante la tarde, hubo bastante ambiente.
El domingo despertó con los cohetes que avisaban de la
llegada de San Isidro a Algatocín desde Salitre en su carroza, preparada con
todo el cariño como los otros años, por la familia Jiménez Ortiz.
En la “Ereta” esperábamos todos los vecinos y vecinas que
organizaron la carroza del pueblo para acompañar andando de vuelta, al patrón
en su visita por los campos del pueblo y Salitre.
Alrededor de 80 personas hicimos el camino, entre rumbas,
sevillanas y pasodobles, junto con refrescos, rebujito y tapitas frías, que
hicieron que el recorrido se hiciera más ameno. Se hicieron varias paradas y
serían las doce cuando llegábamos a la ermita, en la que se realizaría la misa
en honor a San Isidro, amenizada por el coro de Algatocín, Romeros del Rosario.
Posteriormente se sacó en procesión, como todos los años,
hasta la subida del colegio, acompañado por el son de los pasodobles
interpretados por la Banda de Música Virgen del Rosario de Algatocín.
Al terminar, una rica paella gratuita nos esperaba en la
caseta, para dar comienzo a la verbena.
Por la tarde, además del baile, se realizó en la explanada
preparada para tal fin, la tan tradicional carrera de cintas a caballo. Donde
vecinos y visitantes de la zona, exhibieron sus destrezas en el dominio de la
equitación, además de poder disfrutar de la belleza de los caballos que allí se
dieron cita.
La tarde continuó con la entrega de trofeos y los bailes a
cargo del dúo Malacai. Despidiéndose un año más con la satisfacción de haber
echado un buen día de convivencia en homenaje al patrón de Salitre, San Isidro
Labrador.
Desde estas líneas, no queremos dejar de agradecer a todos
los que año tras año, ponen interés en que esta fiesta siga adelante. Entre
ellos a los vecinos de Salitre que colaboran cediendo sus tierras para las
carreras de cintas, a la familia Jiménez Ortiz por su experiencia y disposición
a ayudar, a José Sánchez y Mª Carmen por cedernos el remolque para la carroza y
llevarnos hasta allí, al grupo de caballistas que nos acompañaron en el camino,
haciendo más bonita aún la experiencia, al Ayuntamiento y en especial a
Esmeralda, que a pesar de ser su trabajo, se implica con gran interés y
dedicación; y como no, al grupo de Algatocín en Movimiento por organizar todo
lo relacionado con la carroza y por supuesto, a todos los que en ese día nos
juntamos para disfrutar de la esta tan tradicional romería.
Nos vemos el año que viene.
Eli Barroso.
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